06 septiembre 2006

Al principio...

No sé cuándo empecé a sentir atracción por las imágenes de mujeres atadas, pero desde ese momento y gracias al vídeo empecé a almacenar escenas. Siempre había una cinta preparada por si surgía la escena. A la larga casi podías deducir en unos minutos si un capítulo o una película tendría alguna dama en apuros, era como tener un sexto sentido.

Más adelante gracias a internet uno descubre que no es el único con estas aficiones. Miles de personas en todo el mundo han recorrido el mismo camino. Después de muchos años de recibir creo que tendré tiempo de compartir lo que atesoré.

En mi reciente mudanza he encontrado unas viejas cintas de VHS que grabé durante las largas horas de televisión de mi adolescencia. Las he pasado a DVD gracias a un grabador. Poco a poco intentaré capturlas y compartirlas. A parte de algunas escenas célebres también hay bastantes rarezas capturadas casi al azar.

Lo más antiguo tendrá peor calidad. Supongo que a más de uno esas imágenes algo borrosas le traerán recuerdos de los tiempos en que ver mujeres atadas era una aventura y no solo cuestión de ancho de banda.